Una vez llegué muy tarde a un aeropuerto pequeño, luego de un viaje de casi dieciocho horas.

Me anunciaron que la espera para taxis, Uber o Lyft iba a ser de más de dos horas.

Decidí enfocarme primero en recoger mi maleta y, cuando la tuve, salí del aeropuerto para tomar aire fresco.

Me senté en un banco, cerré los ojos y comencé a imaginarme dándome una ducha calentita, luego ya metida en la cama, descansando rico después del viaje.

Di rienda suelta a sentir todas las sensaciones y, al cabo de unos minutos, abrí los ojos ¡y vi un taxi parado frente a mí!

Le pregunté si estaba esperando a alguien y me dijo que no.

¡Iujuuuu!

A los veinte minutos, yo estaba disfrutando de la ducha que tan vívidamente había imaginado.

«Cuida tu jardín y las mariposas vendrán solas»
(autor desconocido por mí)

La ley de la atracción es universal y está actuando todo el tiempo, lo sepamos o no, lo querramos o no.

Atraemos vibracionalmente lo que somos, y somos lo que lo que pensamos y lo que sentimos.

Todo el tiempo estamos atrayendo, co-creando experiencias.

Algunas de esas experiencias nos gustan y otras no. Todas nos ayudan a definir qué deseamos y qué no y, por lo tanto, todas nos acercan a la materialización de nuestros deseos.  

Lo que te propongo es que aprendas las herramientas para aplicar la ley de la atracción solo a tu favor, para atraer solo lo que tú deseas y vivir así tu vida como la super creadora que eres (puedes leer este artículo sobre 22 cosas que debes entender para aplicar la ley de la atracción a tu favor).

¿Estás lista para poner el foco en el bienestar,
el amor y la belleza y desde ahí crear tu realidad? Yo quiero que seas feliz en tus propios términos.